Los continuos retos que exige el mercado empresarial hacen que las entidades anticuadas e inflexibles ya no tengan cabida en el mundo actual.
?Los cambios deben ser vistos como oportunidades de actualización y mejoramiento, sobre todo en el ámbito tecnológico, pues en este sector las innovaciones son demasiado frecuentes?, asegura Ruth Barrera, sicóloga de Recursos Humano de Ebel International.
En la era clásica, el filósofo griego Heráclito de Efeso afirmó que ?nadie se baña dos veces en el mismo río?. Aunque esta máxima puede ser aplicada en cualquier época o circunstancia, el siglo XXI es un escenario perfecto para su utilización.
?El cambio debe ser percibido como una opción más de penetrar en el mercado. Nuestra organización, por el sector en el que se desenvuelve, está en permanente transformación?, concluye María Luz Giraldo, Jefe de Recursos Humanos de Diveo Colombia.
La cultura del cambio
En muchas compañías, las transformaciones tanto corporativas como empresariales causan incertidumbre o confusión entre los empleados. El temor a ser despedidos, la adopción de políticas comerciales novedosas y la incursión en nuevos mercados, son algunas de las razones para oponerse o criticar un cambio organizacional.
- El cambio como instrumento de mejoramiento.
Según Milena Varela, secretaria de Selección y Desarrollo de 3M, los cambios son herramientas que facilitan y agilizan los procesos. ?La decisión de hacer la elección de candidatos a través Internet, por medio de el empleo.com, fue una transformación que adoptamos para hacer más rápido y efectivo el sistema de contratación?, agrega.
- Los cambios son inminentes e impredecibles.
?En el sector comercial el cambio es permanente y necesario. Sin embargo, las variables que influyen en cada caso, deben ser analizadas para medir las consecuencias y los alcances de una transformación?, asegura Carolina Palacio, Jefe de Selección de Alkosto.
- El cambio como termómetro del mercado.
Según Elizabeth Mena, Jefe de Selección y Salud Ocupacional de Foto Japón, las organizaciones deben estar en sintonía con las tendencias del mercado, pues actualmente los clientes, la competencia y la calidad son más exigentes.
?Las medidas que lleven a cabo las empresas deben estar a la vanguardia de las transformaciones contemporáneas, ya que no se le debe tener miedo al cambio. Por el contrario, los cambios siempre traen mayor exigencia y si son aprovechados positivamente resultarán altamente efectivos para una compañía?, agrega Elizabeth Mena.
- La prevención es el arma más efectiva para afrontar un cambio.
?Aunque por el momento no tenemos preocupaciones en el ámbito empresarial, la planificación y la reestructuración son las mejores formas de prever una transformación?, afirma Martín González, sicólogo de Selección de AIG.
Cambiar no es perjudicial para una compañía. Inicialmente, tal vez cause zozobra o algunos desórdenes internos, pero en el fondo se debe percibir el cambio como una oportunidad de evolución y progreso corporativo.
De esta manera, la continúa capacitación, la planificación constante, el análisis del mercado y una actitud de avanzada son las mejores herramientas para identificar un cambio y poder afrontarlo.
Redacción elempleo.com
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