Probablemente, alguna vez en tu vida te has sentido como un ‘perdedor’ en el ámbito laboral, ya sea porque no consiguiste o perdiste una oportunidad laboral. Pero, ¿qué sucede cuando un profesional exitoso se siente inseguro de sus logros y capacidades?
El llamado ‘síndrome del impostor’ es un fenómeno psicológico que además de generar incertidumbre y ‘autorechazo’ al éxito propio, hace sentir al profesional como un embaucador con todo el trabajo que ha realizado en el pasado y lo que prometió cumplir en su puesto actual. Generalmente, “las personas que padecen este síndrome perciben que su desempeño no se ajustó a las expectativas y que el logro de sus resultados no es atribuible a sí mismo, sino a condiciones externas”, asegura Paula Senior Mesa, docente de la facultad de psicología de la Universidad EAN.
La primera mención a este trastorno se hizo en una publicación realizada por las psicólogas Pauline Clance y Suzanne Imes en 1978.
A pesar de que el fenómeno psicológico no se ha reconocido oficialmente como una enfermedad, afecta a cuatro de cada diez personas (en alguna etapa de sus vidas), según dice Aida Baida en su libro ‘Cómo superar el síndrome del impostor’. Dentro de sus pensamientos, asocian el miedo como emoción principal y sospechan que “serán descubiertos y que sus compañeros, profesores o jefes se darán cuenta de que no son tan competentes como se supone que son, a pesar de que existan evidencias de su éxito en contexto, llevándolos a sobrevalorar de manera negativa su conducta”, afirma Senior.
¿Qué problemas puede traer este trastorno psicológico?
- Rechazo de nuevas oportunidades laborales, proyectos y ascensos.
- Evitar tareas que exigen un gran nivel de compromiso.
- Renunciar a la búsqueda de empleo, incluso, cuando hay insatisfacción laboral en el puesto actual.
¿Qué lo causa?
Esta condición puede tener origen en las ‘historias de aprendizaje durante la infancia’. Según Senior, el ‘impostor’ puede desarrollar este trastorno por “factores predisponentes ligados al sometimiento del niño a permanentes evaluaciones negativas de su desempeño o la falta de retroalimentación por parte de padres, cuidadores o docentes, los cuales conservaban expectativas superiores a las comunes en esas etapas de desarrollo, siendo poco asertivos en el seguimiento del aprendizaje del niño”.
(Registra tu hoja de vida en nuestro portal y recibe ofertas laborales)
Las personas no solo padecen de este síndrome en el ámbito académico y laboral, sino que también se puede desarrollar en el ámbito personal y en pareja, pues se asocia con individuos que poseen “rasgos perfeccionistas, con la necesidad de control de alguna situación, no tolerantes a la incertidumbre y con un nivel de autoeficacia desproporcionado a las demandas del contexto al que pertenecen”, señala Senior.
¿Cómo tratar el síndrome del 'impostor'?
- Habla con seres cercanos que reconozcan y valoren tus logros.
- Realiza una lista de logros, con ella puedes identificar tu valor como profesional.
- Realiza una introspección sobre sus competencias y cualidades.
- Acude con un especialista que te ayude a identificar con certeza el problema y a descifrar la causa de la desconfianza e inseguridad en ti mismo.
(¿Quieres destacar tu currículo? Adquiere los beneficios de elempleo VIP)
Comentarios